Musicalmente solo me muevo por obsesiones. Una pena que Spotify no me diga cuantas veces he escuchado sus temas, podría pedir a la gente de Fauve que me incluyan en los créditos de su futuro álbum, con todo lo que han tenido que ganar gracias a mi escucha non stop desde hace tres meses de su primer EP, Blizzard; por muy poco generoso que sea Spotify con los artistas.
Mi hype machine parisina me enseñó hace unos meses el vídeo de Blizzard, y de Kané, los primeros hits de este corporativo francés del que se sabe poco de sus componentes, pero mucho de su música. Y desde .
Un nombre inspirado de la película Les Nuits Fauves, vídeos caseros (pero ojo, no sin calidad), una estética visual impecable, un EP autoproducido, fines de semana mandando cajas de camisetas y discos a sus primeros fans, esta gente se lo curra, rechaza ofertas de discográficas atentas a la próxima sensación Indie, y hace funcionar el boca oreja.
Apadrinados por los siempre presentes Inrockuptibles, aparecen en su compilación del Laboratorio de la revista en enero 2013, y se presentan con este vídeo:
Desde entonces, han llenado de veinteañeros todas las salas de Paris y de provincia, han aparecido en el siempre muy vanguardista sello Kitsuné, en su compilación Parisien 3, Le Monde también se ha hecho eco de sus primeros pasos; han girado por los festivales más importantes del hexágono, hasta hace dos días compitiendo con Phoenix en el Rock en Seine, el escenario les quedó pequeño.
En las entrevistas piden que no se mencionen sus nombres, que no les saquen fotos, tocan en directo sin luces. Estrategia marketing o humildad, con unas letras que reflejan los problemas del día día, amor/trabajo/muerte/familia/alcohol/sexo, quejas adolescentes o real malestar de una generación desencantada, el «spoken word» de los 5 músicos no deja indiferente.
Nuits Fauves @LeMouv:
Cock Music @Deezer
Fauve tiene 97.209 fans en Facebook, 12.469 seguidores en Twitter, y 4.624 seguidores en Instagram.
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